Arifureta v9 c2

Agradecimientos a En do y AnmesicCat.


La desaparición de Aiko

 

El evento ocurrió en algún momento posterior.

Tres semanas habían pasado desde el momento que el equipo de Kouki había recibido el impacto del reencuentro, y los complicados sentimientos debido a la separación en la «Ciudad Postal[1], Hol-ad».

Actualmente, había una cosa que el equipo de Kouki debía tratar de inmediato: matar a gente. No serían capaces de seguir peleando, siempre y cuando no lo resolviesen, por lo que regresaron a la Capital Imperial. Era necesario que ellos experimentasen el “asesinato” si querían participar en la guerra contra la raza Demoníaca. Ellos sólo serían lastres si no podían superarlo.

Para empezar, no serían capaces de pensar correctamente, ya que no quedaba mucho tiempo. El evento que ocurrió en Ul había alcanzado sus oídos. Era evidente que el movimiento de la raza Demoníaca se había vuelto más activo ya que ellos mismos habían sido atacados, y todos podían adivinar que la guerra se acercaba. Por lo tanto, lo más rápido posible, el equipo de Kouki quería superar este problema por todos los medios.

Actualmente, el equipo de Kouki estaba haciendo prácticas de batalla contra los Caballeros al mando de Meld. Ryuutarou, el equipo de Kondou, y la pandilla de Hiyama; aquellos que ya estaban preparados para ello, en realidad se preguntaban a sí mismos si realmente podían hacerlo, después de ver a Hajime disparar a la cabeza de la mujer de la raza Demoníaca. No quedaba mucho tiempo, pero terminarían destrozados[2] si fueran obligados a asesinar, por lo que Meld y los Caballeros también estaban buscando una solución.

Hacia los pesimistas, una pequeña y buena noticia había llegado.

Era el regreso del equipo de Aiko. Normalmente, el carisma de Kouki sería capaz de hacer que la clase auné esfuerzos. Sin embargo, el héroe estaba deprimido, lo cual dejó a todos deprimidos también. La razón para que no estén destrozados por la severa derrota y el actual problema, fue gracias a las acciones de Suzu, las cuales fueron seguidas por la gente imprudente como Shizuku y Nagayama. Aun así, sus mentes engullidas por el malestar, se obligaron a sí mismos a mirarlo más detenidamente que darle la bienvenida al adulto con el que estaban familiarizados y en el que confiaban[3]. Todos realmente querían reunirse con la profesora que siempre se esforzaba por sus estudiantes.

Escuchando que Aiko había regresado, Shizuku hizo el primer movimiento. Ella quería preguntarle a Aiko sobre varias cosas, por lo que terminó pronto su entrenamiento. Quería escuchar la impresión de los compañeros de clase que se reencontraron con Hajime mucho antes que ella, y quería intercambiar información de manera objetiva con Aiko, quién ni da cosas por sentadas ni hace prejuicios.

Llevando la vaina de color negro azabache que recibió de Hajime, y un cinturón para otra espada de doble filo de color negro azabache, Shizuku caminó a través del pasillo en el palacio real. Su apariencia, de alguna manera, hizo que damas más nobles y criadas se ruborizasen, una acción comparable a otros hombres. Era un problema que perseguía a Shizuku incluso en este diferente mundo. Realmente quería ser librada de ser llamada “Onee-sama” por las mujeres que eran mayores que ella.

Habiendo escuchado las cosas que Hajime hizo en Ul, Shizuku quería preguntarle directamente a Aiko lo que ella pensaba de Hajime. Dependiendo de la impresión de Aiko, la mente actual, y en equilibrio de Kouki, podría inclinarse hacia un punto indeseado. A donde quiera que vaya, la naturaleza de Shizuku la agobiaba con dificultades.

“Sin duda, también hubo un caos cuando ellos estaban en Ul… pero él también me dio esta espada parecida a una katana… En serio, qué pasa con “robusto y capaz de cortar bien cualquier cosa”. ¿No es un artefacto que está al nivel de un tesoro nacional?”

Hablando con ella misma, Shizuku movió su mano en silencio hacia la Katana que colgaba de su cintura. Caminando hacia la habitación de Aiko, Shizuku recordó la vez que visitó la herrería del Reino, por el bien del mantenimiento de su katana.

Shizuku llamaba a su katana simplemente como katana negra, y la mostró al mejor herrero del Reino. Al principio, el herrero era formal ante ella como una de las “Apóstoles de Dios”. Sin embargo, su actitud cambió por completo tan pronto como examinó la katana negra con la magia de apreciación, y le preguntó a Shizuku mientras la agarraba por sus hombros. Por consiguiente, como si su anterior actitud era sólo una mentira, la bombardeó con preguntas, no, la interrogó con palabras, tales como de dónde lo obtuvo y quién era el creador.

Aunque ella se quedó estupefacta, Shizuku de alguna manera se las arregló para recuperar su calma y preguntó qué pasaba. El herrero dijo que incluso dentro de la tesorería del Reino, esta espada debería ser más o menos igual a la Santa Espada. Aunque su potencia de salida y capacidad para recibir el poder mágico no alcanzaba a la Santa Espada, su funcionalidad y pequeños detalles como arma estaban por encima de la Santa Espada.

A continuación, un examen detallado encontró que si se suministraba con poder mágico, la hoja se extendería unos 60 centímetros en forma de cuchilla de viento. Además, dos hojas más se crearían junto a la parte extendida, y podían ser disparadas.

Entonces, se examinó la vaina. Se comprendió que la vaina estaría revestida en truenos si era suministrado con poder mágico, y había una parte parecido a un interruptor en la boca de la vaina que disparaba agujas con una tremenda fuerza.

La parte de la hoja estaba hecha de azanthium, por lo que no se quebraría y casi no había necesidad de someterla a un mantenimiento. El mantenimiento era sólo para reponer las agujas si eran utilizadas.

Sin embargo, había un problema, no tenía una formación de magia para abastecerlo con poder mágico. Era una cosa natural. Hajime era capaz de manipular directamente la magia y originalmente, nunca pensó en entregárselo a nadie. Por lo tanto, no era una equivocación cuando dijo “robusto y capaz de cortar muy bien las cosas”, si era utilizado por Shizuku.

Esas fueron las únicas funciones instaladas, y la misteriosa espada negra (o así la habían visto los herreros) sólo podía ser utilizada mediante la manipulación directa del poder mágico, esto hizo que los herreros del Reino ardiesen con espíritu de lucha.

‘¡A pesar de que no podemos crear una arma con estos minúsculos detalles y funcionalidades, vamos a hacer que esta espada sea utilizable!’ fue lo que ellos pensaron. En resumen, ellos de alguna manera harían que el poder mágico del usuario sea suministrado a la espada por cualquier medio. Dando como resultado que, después de tres días y noches, los herreros, con el mejor como el líder, dejaron a un lado todos sus otros trabajos y de alguna manera lograron crear la formación mágica.

Como tal, Shizuku sería capaz de usar las habilidades de la katana sin un conjuro. Después, los herreros, cuyo poder mágico se terminó, se durmieron durante varios días con expresiones verdaderamente felices.

Shizuku estaba mirando a la distancia al recordar el espectacular espíritu de artesanía, entonces llegó a su destino, la habitación de Aiko. Ella llamó, pero no hubo respuesta. Escuchó que Aiko iba a informar al Rey y a los demás oficiales, por lo que Shizuku pensó que ella no debió haber regresado. Apoyándose en la pared, Shizuku decidió esperar el regreso de Aiko.

Treinta minutos habían pasado hasta que Aiko regresó. Sus pasos podían escucharse desde el pasillo interior, los cuales, de alguna manera, sonaban deprimidos. Aiko estaba caminando sin mirar hacia delante, y su seria expresión hizo que Shizuku entendiese que ella estaba pensando desesperadamente sobre algo en su cabeza.

De este modo, Aiko ni siquiera vio su habitación, ni a Shizuku justo al lado de su puerta, y pasó por delante. Mientras se preguntaba que había pasado, Shizuku llamó a Aiko.

“Sensei… ¡Sensei!”

“¿¡Hoeh!?”

Levantando una tonta voz, su cuerpo se estremeció por la sorpresa. Aiko miró a su alrededor y finalmente vio a Shizuku. Después, suspiró de alivio al ver su aspecto saludable, y entonces sonrió con alegría.

“¡Yaegashi-san! Mucho tiempo sin verte. ¿Tienes buena salud? ¿Estás ilesa? ¿Están los demás a salvo?”

A pesar de que ella había estado deprimida hasta ahora, las cosas que dijo eran sólo sus preocupaciones sobre sus estudiantes. Hacia la Ai-chan sensei que no cambia, la alegría también apareció en la mirada de Shizuku mientras sonreía, y una sensación de seguridad llenó su mente. Durante un rato, las dos estaban felices por la seguridad de los demás y su reencuentro, entonces entraron en la habitación de Aiko para una consulta e intercambiar información.

* * *

“Así que, eso es lo que pasó… Shimizu-kun fue…”

Shizuku y Aiko estaban solas en la habitación, e intercambiaron mutuamente información mientras bebían el té de dentro de las tazas adornadas con lindas patas de gato. Al oír las cosas que sucedieron en Ul, esas palabras fueron la respuesta de Shizuku.

Dentro de la habitación, una extraña atmósfera flotaba en el aire. Aiko también dejó caer sus hombros abatidamente; era evidente que estaba deprimida por Shimizu. Pensando en la personalidad y el sentido de la responsabilidad de Aiko, Shizuku no podía dejar de preocuparse, sin importar cuál era la circunstancia, pero ella no podía encontrar las palabras necesarias.

Sin embargo, aunque Shizuku era reacia a dejar que Aiko siga estando deprimida, así que tan alegre como era posible, ella se regocijó por la seguridad de Aiko.

“Me siento mal por Shimizu-kun… sin embargo, realmente estoy contenta de que Sensei está viva. Realmente quiero agradecer a Nagumo-kun.”

Hacia la sonriente Shizuku, Aiko estaba reflexionando debido a que de nuevo hizo que su estudiante se preocupe por ella, y entonces devolvió una sonrisa.

“Ya veo. En nuestro reencuentro, él no tenía ningún interés en nosotros y en este mundo… pero fue a salvar a Yaegashi-san y los demás. Además, incluso protegió a una niña pequeña… Fufu, es posible que alguna parte de su pasado haya regresado. ¿O debería decir que está creciendo mientras cambia? … se ha vuelto en alguien confiable.”

Diciendo esto mientras miraba a lo lejos, de alguna manera, las mejillas de Aiko estaban… ligeramente teñidas de rojo. Shizuku estaba confundida mientras pensaba, ¿No es esa una extraña reacción por sólo recordar a uno de sus estudiantes? Ella observaba mientras Aiko se reía a veces mientras recordaba algo, “Fufu”.

Notando la mirada de Shizuku, ‘¡Cough!’, Aiko se aclaró la garganta. Sin embargo, ella fue incapaz de suavizar las cosas, sus mejillas convulsionaban, y ella obtuvo un mal presentimiento. Shizuku decidió seguir adelante. Mientras se persuadía, a medias, a ella misma de que no podía ser posible, dijo,

“¿…Sensei? Por nuestra charla, sensei dijo que él te salvó de una situación peligrosa, ¿puedes decirme los detalles?”

“¿¡Eh!?”

“Bueno, se dijo que sensei podría haber muerto, así que quiero escuchar cómo te recuperaste de eso…”

“S-Sobre eso…”

Shizuku recordó la medicina especial que rápidamente curó al casi muerto Meld, pensó que debía ser eso, por lo que se hizo la tonta y preguntó a Aiko. Las mejillas de Aiko empezaron a ponerse más rojas que antes. Su mirada estaba perdida y era vacilante, ella murmuró sus palabras… en verdad era sospechoso.

Como espadachina que era, Shizuku fue al tema[4].

“… Sensei. ¿Pasó algo entre tú y… Nagumo-kun?”

“!? N-No hay manera de que sucediese algo, ¿sabes? ¿S-Sólo que estás tratando de decir? ¡Era sólo lo habitual, yo como profesora y él como estudiante!”

“Sensei. Por favor, cálmate. Tú expresión se ha vuelto extraña.”

“!”

Aiko estaba realmente agitada. Frenéticamente, Aiko murmuraba, “Soy una profesora, soy una profesora…”. Aiko debe haber pensado que estaba murmurando en su mente, pero no lo estaba. De este modo, Shizuku estaba convencida. Aunque no entendía en qué etapa estaba, Aiko comenzó a tener un sentimiento especial hacia Hajime, ¡uno diferente que hacia los demás estudiantes!

“¡Nagumo-kun! ¡Como persona! ¿¡Qué le hiciste a Ai-chan!?”[5]

En este momento, cualquiera podía ver que las mejillas de Shizuku estaban convulsionando mientras ella estaba pensando de esa manera. Hajime ya se había convertido en un Don Juan[6], cuyo nivel ni siquiera podía compararse con Kouki. Aunque a diferencia de Kouki, Hajime no era denso hacia el cariño de los demás, y había respondido a ello con claridad… y tiene que haberle dicho eso a Aiko también.

La rival de su mejor amiga, apareciendo en un inesperado lugar, hizo que Shizuku mirase hacia el techo con su mano cubriéndose la mejilla que convulsionaba. Independientemente del género, Shizuku había llegado a odiar ese lado de Hajime, y una peligrosa idea de propagar en serio un doloroso apodo había pasado por su cabeza… a lo cual se las arregló para darse por vencida.

Aiko y Shizuku trataron de tranquilizar las cosas al aclararse varias veces sus gargantas, entonces continuaron su anterior conversación como si nada hubiera sucedido.

“Entones, Sensei. ¿Ocurrió algo cuando informaste al rey? Después de todo, parecía haber sido una conversación seria.”

La pregunta de Shizuku hizo que Aiko recordara algo, y ella tenía una amarga expresión donde el enfado y la desconfiaba estaban mezcladas.

“… Oficialmente, Nagumo-kun es estigmatizado como un hereje.”

“!? ¡Eso es—! … ¿Qué quieres decir? No, de alguna manera puedo suponerlo… ¿pero no es una decisión apresurada?”

Hajime era poderoso. Con sólo varias personas, repelió a más de 60.000 bestias demoníacas mientras utilizaba misteriosos artefactos. Los camaradas de Hajime también poseían un increíble poder. Sin embargo, su postura era que no cooperaría con la Iglesia de los Santos e incluso se opondría dependiendo de la situación. Era cierto que Hajime era una existencia verdaderamente peligrosa para el Reino y la Iglesia de los Santos.

Sin embargo, esto era realmente demasiado apresurado, el estigmatizarlo como un hereje tan rápidamente. El estigma[7] de hereje era dado a aquellos que desobedecían las enseñanzas de la Iglesia de los Santos y se convertían en los enemigos de Dios, y tal estigmatización haría legal que cualquiera someta a Hajime en cualquier momento, y en cualquier lugar. Y de acuerdo a la situación, incluso los Caballeros del Templo[8] y el ejército del Reino podrían marchar.

Siguiendo a eso, al atacar a Hajime porque era un hereje, ellos recibirían el tratamiento de ser un enemigo de Hajime, sus despiadados y severos ataques. No había manera de que el Rey y las personas de la Iglesia no conocieran el peligro. Sin embargo, Aiko dijo que ellos lo decidieron de inmediato. No había manera de que Shizuku no estaría sorprendida por eso.

Shizuku lo había supuesto hasta ese momento, lo cual hizo que Aiko asintiese en admiración hacia la invariable persona de rápido aprendizaje.

“Es completamente como dijo Yaegashi-san. Además, no importa si tiene un tremendo poder y no sigue a la iglesia, él terminó salvando a Ul, pero ellos ignoraron mis protestas. Nagumo-kun había esperado esta situación, por lo que reforzó mi título como “Diosa de la Abundante Cosecha”[9]. Además, escuché de los guardaespaldas que el nombre de “Diosa de la Abundante Cosecha” y “La Espada de la Diosa” se habían extendido muy lejos, hacia otras ciudades. Por lo que, al marcarle como hereje, esto significa que la iglesia está negando a la “Diosa de la Abundante Cosecha”, que salvó a las personas. De este modo, ellos no deberían ser capaces de ignorar fácilmente mis protestas, o así debía ser. Pero esas personas forzaron la decisión. Obviamente, estaban siendo extraños… además, recordé que además de Isthal y la gente de la iglesia, el aspecto del rey y la realeza eran extraños…”

“… Eso es preocupante. Sólo en qué están pensando… Pero en lo que no podían hacer algo y pensar, era en “quién” deberían enviar hacia el poderoso Nagumo-kun, ¿verdad? Y eso es todo.”

“… Eso es así. Quizás…”

“Eeh. Sólo estamos nosotros… pero absolutamente me negaré a eso, ¿sabes? No quiero morir. Si me convierto en la enemiga de Nagumo-kun… No quiero imaginarlo.”

Shizuku se estremeció, y Aiko hizo una forzada sonrisa, entendiendo lo que Shizuku sentía.

Por consiguiente, antes de que el Reino y la Iglesia le cuenten a Kaori y los demás que peleen contra Hajime, Aiko decidió hablarles sobre las cosas que Hajime le contó. Sobre los Dioses Locos y su propósito durante sus viajes. Ella no tenía ninguna prueba, por lo que no sabía si Kouki y los demás la creerían. Además, hasta ahora ellos dieron su mejor esfuerzo porque creían que Dios los devolvería a su mundo original, siempre y cuando ganen la guerra contra la raza Demoníaca.

En verdad, Dios se deleita en la reacción de las personas por Sus acciones, y la posibilidad de regresar es extremadamente baja. ¡Por lo que vayamos a echar un vistazo a las moradas de los que se rebelaron contra los dioses en los antiguos tiempos, y busquemos una manera de volver por nosotros mismos! Nadie lo creería si esas palabras se dijesen de repente. Después de que Kouki y los demás escuchen lo que ella les contase, si ellos querían verlo como una tontería y continuar luchando como antes, o creerla y buscar otra manera… Eso no era algo que Aiko podía predecir. Sin embargo, quería grabarlo en ellos para que no crean ciegamente a la Iglesia. Aiko se convenció a sí misma para hacer eso ahora.

“Yaegashi-san. Nagumo-kun sabe que su información es poco creíble y será antagonizado por Amanogawa y los demás, por lo que sólo me dijo esto a mí.”

“Información… ¿es eso?”

“Sí. Es sobre los adoradores de Dios por la iglesia y el objetivo del viaje de Nagumo y las chicas. Él no me dio ninguna prueba sobre ello… pero es realmente una información importante, así que esta noche… no, esta tarde, quiero contar esto a todos.”

“Eso es… no, lo entiendo. Entonces, ¿debo llamar a todos ahora?”

“No, se trata de una información que no quiero que lo sepa el bando de la iglesia, así que quiero contarlo en el momento que todos se han reunido naturalmente; en la cena. Y tenemos que ser capaces de hablar entre nosotros, si dijera que quiero pasar tiempo con los estudiantes que no he visto por un largo tiempo, sin ningún extraño.”

“Cierto… lo entendí. Entonces, es en la cena.”

Después, una buena cantidad de tiempo había pasado mientras Shizuku y Aiko charlaban. Sin embargo, ellas no podían saber que la promesa para la cena no podía llegar a ocurrir…

* * *

Era la tarde.

Mientras el sol se ponía, daba un regalo de despedida de un vivo color naranja, y Aiko estaba caminado por el pasillo vacío. La luz del sol de la tarde entraba por las ventanas del pasillo y dibujaba un evidente contraste en la pared y el suelo del otro lado.

Aiko fue hacia el comedor, mientras su mirada estaba cautivada por el sol de la tarde, pero inmediatamente se detuvo después de que sintiese la presencia de alguien. Cuando volvió a mirar hacia adelante, vio la figura de una mujer dentro de la sombra. La mujer caminó hacia la mitad del pasillo, y se detuvo con gracia, tenía una postura recta. Su ropa era el hábito de la monja de la Iglesia de los Santos.

La mujer era hermosa, sin embargo, le habló a Aiko con una voz un tanto mecánica y fría.

“Encantada de conocerte, Hatayama Aiko. He venido a por ti.”

Aiko sintió que un escalofrío le recorrió su espalda cuando escuchó su voz, pero fingió su calma para no ser descortés con alguien que conocía por primera vez.

“Umm, encantada de conocerte también. Viniendo a por mí… ¿te refieres a la cena con los estudiantes?”

“No, tu destino es la iglesia principal.”

“¿Eh?”

La frase, la cual no le dio la oportunidad de responder, hizo que Aiko pregunte de nuevo sin querer. En ese momento, la mujer salió de la sombra hacia un lugar iluminado por el sol de la tarde. Al ver a la mujer, Aiko contuvo el aliento. Incluso Aiko, que era del mismo sexo que ella, fue instintivamente hechizada por la belleza de la mujer.

Su plateado cabello estaba brillando mientras reflejaba la luz del sol de la tarde. Con unos grandes y estrechos ojos azules, y sus misteriosas y maravillosas características que parecían ser tanto de una mujer adulta como de una joven chica; todas sus partes estaban bien proporcionadas. Su altura era alta para una mujer, sobre unos 170 centímetros, lo cual obligó a Aiko a mirar hacia arriba. Su piel blanca era lisa como la porcelana blanca, sus manos y pies[10] eran delgados. Sus pechos ni eran grandes ni pequeños, eran de un tamaño verdaderamente exquisitos, si uno estaba pensando en el equilibrio de su totalidad.

Sin embargo, ella lamentablemente no tenía ninguna expresión. En lugar de estar inexpresiva, era como si llevaba una máscara de Noh. Nadie podría dudar si se dijera que ella era una estatua — la mejor obra de un famoso escultor. La mujer poseía una inhumana y artística belleza.

Hacia Aiko, que contenía su aliento, la mujer sonrió e indiferentemente continuó sus palabras.

“Nos dimos cuenta de que lo que vas a contarles será inconveniente para nosotros. Después de todo, lo que tus estudiantes van a hacer ahora parece “interesante” para nosotros. Por eso, hasta que llegue el momento, dejarás temporalmente el escenario.”

“¿Q-Qué estás…?”

La hermosa monja se acercó lentamente sin siquiera dar un paso, y Aiko instintivamente retrocedió. Entonces, vio que los ojos azules de la monja brillaron. Aiko sintió que su mente se volvía borroso. De inmediato, se concentró como si fuera a invocar la magia, y su confusión se dispersó en un instante.

“… Ya veo. Como era de esperar, sólo puedo ignorar que estás llamándote a ti misma “Dios”. Para que seas capaz de resistir mi “encanto”. No hay otro camino. Te tomaré por la fuerza.”

“¡N-No vengas! L-Lo que quiero— …¿¡ugh!?”

La presión del verdadero carácter de la mujer hizo que Aiko de inmediato tratase de activar su magia. Sin embargo, más rápido que ella terminando el conjuro, la monja acortó momentáneamente su distancia y dirigió su puño hacia su estómago. Aiko se derrumbó, y en ese momento sintió que su conciencia estaba a punto de ser tragada por la oscuridad, ella escuchó el murmullo de la monja.

“No te preocupes. No te mataré. Eres una pieza excelente, y podrías ser útil contra ese irregular.”

El chico de pelo blanco y con un parche en el ojo apareció en la mente de Aiko. Siguiendo a eso, mientras sabía que no le alcanzaría, ella gritó su nombre en su mente justo antes de que su conciencia desapareciese por completo.

———— ¡Nagumo-kun!

* * *

“?”

La monja que fácilmente se cargó a los hombros a Aiko como si no tuviese peso, entonces miró por los alrededores del pasillo como si hubiera sentido a alguien. Durante un rato, la monja buscó algo en silencio. Entonces, lentamente abrió la habitación de invitados que estaba en el pasillo.

Siguiendo a eso, entró en la habitación, miró por dentro, se acercó al armario sin hacer ningún ruido de pasos, y abrió la puerta con fuerza. Sin embargo, no había nada en el interior, por lo que la monja ladeó la cabeza y miró a su alrededor una vez más, mirando aquí y allá. En poco tiempo, después de no encontrar nada, se cargó a Aiko sobre el hombro de nuevo y salió de la habitación.

Con el silencio regresando a la habitación, un tembloroso murmullo se podía escuchar.

“… Debo decir esto a… alguien—”

Nadie estaba dentro de la habitación. Sin embargo, pasos retirándose se podían oír, y en poco tiempo, la habitación recuperó completamente su silencio.


«« Anterior capítulo | Siguiente capítulo »»


Notas

1 “Post Town”, el “post” puede ser postal, o código postal, o… ni idea.
2 Destrozados mentalmente, pensando una y otra vez en el acto que has cometido, sin poder aguantar la pesada carga que inunda tu corazón, haciendo que caigas en una profunda depresión…
3 Ni idea “forced themselves to look more than welcoming to the adult they were familiar with and trusted”, la parte “to look more than” me deja confundido.
4 “cut to the case”, no estoy seguro de esta traducción.
5 [Delirios] Ambos se estaban mirando, ella estaba apoyada sobre sus brazos y sobre el suelo, mientras él la estaba sujetando y mirando a los ojos. Ella jadeaba, no tenía fuerzas para resistirse. Sus labios se juntaron, aunque al principio ella se quiso resistir, pero fue en vano. Para terminar de derrotarla, él introdujo su lengua, haciendo que sus fluidos se unan, creando un hilo de color plateado cuando separaron su beso. (faltan detalles Shia el veneno los demás, pero no creo que sean necesarios, ¿verdad?)
6 No existe traducción para “flag raiser” al venir esta definición de los simuladores de citas. Pero podemos poner algo parecido, Don Juan o Casanova. Creo que otros valdrán, pero en este momento no me viene nada a la mente.
7 Como he usado (“brand” ~ estigmatizar, marcar, catalogar, etc) estigmatizar, ahora tengo que usar estigma. Básicamente es lo mismo, si utilizamos su significado figurado, no el literal.
8 No son “Knights Templar”, por eso no los puedo llamar Templarios.
9 Ahora es “Goddess of Bountiful Harvest”, ha pasado de “Good” a “Bountiful”… Esto me rompe los esquemas.
10 Supongo que debían ser brazos y piernas, pero pone “hands and feets”.

9 Responses to Arifureta v9 c2

  1. Pingback: Arifureta Shokugyou de Sekai Saikyou – Novela Web | Sekai to Mugen no Sora

  2. Brian López says:

    Siempre pasa algo malo, hay varias novelas que tienen cosas así, la del héroe del escudo que la ley asta el no me acuerdo, bue la termine, la de okamura hiiro, que la sigo cada tanto, y otras. Pero lo que más siempre me enfermo es la obsesión con las religiones, como el cristianismo en su momento de mayor locura…

    Like

    • Jacob Isaac says:

      no solo el cristianismo pana, cualquier culto o ideologia es objeto de abuso para los dirigentes a eso si le sumas la ignorancia de la gente, que les gusta ser manipulados no tienen autonomia solo se dejan llevar por ideas externas y es ahi donde aprovechan los manipuladores

      Like

  3. santiago says:

    gracias por la traduccion

    Like

  4. Pingback: [Novela] Arifureta [96/??][Vol.10 Cap.06] – TuAnimeFreeBlog

  5. wretched egg says:

    gracias por la traduccion

    Like

  6. Ecle Chan says:

    Eso de que el rey y los otros actuasen raro ¿manipulación divina?
    La monja es una enviada directa de los dioses?
    Espero que sea nuestro asesino-kun el que vió todo y lo cuente cuanto antes,
    Hajime será capaz de salvar a Akio-chan?

    Liked by 1 person

  7. Benxall says:

    Supongo que sera el asesinó de sombra fina

    Like

  8. Pingback: Capítulo 92 - Arifureta -

¿Algún comentario?